Mucho se habla acerca de la adopción gay en nuestro país, y es verdad, es un tema complejo y diverso como hemos visto.
Pero que piensan esas niñas y niños que son adoptados y en donde queda su voz de aprobación o protesta con la familia qué van a vivir o con la que les tocó vivir?
Muchos estudios demuestran que los menores que son adoptados por parejas del mismo sexo crecen sin ninguna clase de trastorno, influencia o conducta diferente a los niños que crecen en la unión de una pareja conformada por un papá y una mamá, pero entre estos estudios y la realidad hay mucha tela por cortar. Existen testimonios que evidencian lo contrario y otros que por el contrario son imparciales.
Muchos psicólogos afirman que no es que no haya una repercusión en sus mentes, la explicación es que el niño se adapta a la situación en que vive. Inclusive, la formación de un niño en una familia heterosexual es muy diferente a la de otro niño en otra familia heterosexual. Los estilos de crianza y costumbres son diferentes.
Para hablar de adaptación, podríamos citar el ejemplo de un niño que crece solo, bajo el cuidado de su mamá; al no contar con la presencia de un padre desde bebe, su modelo de hogar será su mamá, pero a largo plazo va a tender a comparar el hogar en el que le toco crecer, con el hogar en el que le hubiese gustado o con el que la sociedad cataloga como correcto y es ahí en donde la presencia de un padre hubiese sido de mucha importancia para una formación integral e igualitaria como la mayoría de otros niños.
Algunos aceptarán la vida que les tocó y será algo normal, otros tendrán presente siempre esa situación como un hecho frustrado. Lo cierto es que en nuestros primeros años no extrañamos ni cuestionamos lo que no conocemos o lo que no hemos vivido.
Lo mismo sucede con un menor que es adoptado desde muy pequeño por una pareja conformada por dos personas del mismo sexo, en un principio el niño se va a acomodar a la situación de tener dos mamás o dos papás porque es el medio en el cual está creciendo y se está desarrollando como persona, pero a futuro y en cada una de las etapas de su vida,irá aceptando o rechazando este modelo de vida al compararlo con el que hubiese sido el correcto. El ser humano siempre está cuestionando y comparando su vidacon la de otro y eso es un hecho que se da no solo a nivel personal y social sino a nivel económico y laboral.
Sin importar si se tienen dos buenas mamás o dos buenos papás, su capacidad de comparar su núcleo familiar con otras familias tradicionales y sentirse orgulloso o inconforme con su familia, dependerá de su capacidad psicológica, de su entendimiento y de su correcta formación. Esta situación obliga desde todos los puntos de vista a un niño a desarrollaruna personalidad muy definida y consciente para afrontar su vida en sociedad. No podemos olvidar que la gente tiende a ser dura y señalar lo que no es común para ella. Finalmente el niño tendrá que ser quién salga en defensa o en rechazo de una una decisión en la que no tuvo ni arte ni parte.
Todos llegamos a una edad en donde cuestionamos el porquéde todo, muchos hemos llegado a pensar o decir “porque mispapás me pusieron este nombre que me averguenza o me hace sentir mal?” me hubiese gustado llamarme de tal manera. Y esto es solo hablando de una situación trivial.
En la actualidad el número de niños que necesitan un hogar está en crecimiento y la intensión de adopción por parte de la comunidad LGBTI sería una buena alternativa si es por darle un hogar, amor y protección a un niño desamparado, pero hasta donde cree usted que esto es correcto?
